En el marco de mi labor dentro de la Institución Patronato de Liberados Bonaerense y cómo observadora participante de los Dispositivos de Nuevas Masculinidades, el presente artículo pretende dar cuenta de las políticas de género llevadas adelante dentro de dicha Institución y de la experiencia directa con los sujetos involucrados, en este caso en la Delegación con sede en el partido de Florencio Varela.
El Patronato de Liberados Bonaerense (en adelante PLB) es una institución pública que depende del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y se encarga de acompañar a personas mayores de edad que están en libertad, ya sea porque han cumplido su pena y han sido liberadas, porque su sentencia no implica prisión o porque están cumpliendo arresto domiciliario.
La Ley 12.256 de Ejecución Penal de la Provincia de Buenos Aires, establece el marco general para la ejecución de la pena en la provincia. Asimismo, le otorga funciones al PLB cómo supervisar y asistir a personas liberadas o con medidas alternativas; promover la participación en su reinserción social, entre otras.
Dentro de este contexto, hace varios años que algunas delegaciones comenzaron a ofrecer talleres para hombres involucrados en causas penales relacionadas con violencia de género tipificadas cómo lesiones, violación de domicilio, amenazas, entre otros. Esta iniciativa cobró mayor relevancia en los años 2019 y 2020, cuando se convirtió en un eje central de la gestión y se implementaron capacitaciones específicas para abordar esta problemática de manera efectiva.
En este sentido, para regular su funcionamiento y adaptar sus acciones a los contextos y necesidades actuales, el PLB emite distintas resoluciones y protocolos. En relación a esto, la resolución 4/2024 aprueba el Protocolo de Intervención de los Dispositivos de Masculinidades, destinado a varones que ejercen violencia de género. Este protocolo establece lineamientos para la intervención y tratamiento de este grupo, buscando su reinserción social y la prevención de la violencia.
De igual modo y adentrando a la especificidad de lo que se quiere reflejar, el PLB ha trabajado en la elaboración de un documento con el objetivo de establecer la incidencia de personas supervisadas por delitos cometidos en contextos de violencia por razones de género. Uno de los aspectos investigados fue la incidencia de la población con supervisados por esta problemática según su condición legal.
El estudio permitió relevar datos concretos que destacan diferencias relevantes según el tipo de situación judicial. La incidencia de causas vinculadas a violencia de género varía según el tipo de supervisión. Es más alta en la población no pospenitenciaria (26 %), seguida por quienes tienen arresto o prisión domiciliaria (13 %), y es menor en la población pospenitenciaria (9 %).
Dichos datos se ven reflejados en la población participante de los Dispositivos de Masculinidades llevados adelante en la Delegación con sede en el partido de Florencio Varela desde el año 2023 y hasta la actualidad debido a qué la mayoría de los supervisados se encontraban cumpliendo medidas alternativas, Suspensión de Juicio a Prueba o cumpliendo Condena Condicional.
Considerando esto, las personas llegan al PLB por imposición judicial y con una resolución por parte de los Juzgados y Tribunales intervinientes en sus causas. En este Oficio Judicial se encuentran las reglas de conducta que se le son impuestas y que deben cumplir hasta el vencimiento de la pena o supervisión. En el caso de delitos relacionados a Violencia de Género, una de esas reglas es participar del Dispositivo de Masculinidades.
En este sentido, en su primera presentación a nuestra Institución se le informan dichas reglas y, al momento de comunicar la necesidad y obligación de participar del taller se puede observar que la gran mayoría se muestra reticente a esta normativa y manifiesta no comprender el motivo de la misma.
No obstante, desde nuestro lugar cómo Trabajadoras Sociales entendemos que la intervención comienza en ese momento en que mantenemos la primera entrevista con el supervisado, por lo que se le explica brevemente de qué trata el Dispositivo, entendiéndolo cómo un espacio participativo y psicoeducativo dónde los ejes temáticos, a saber, emociones; desigualdad; Ley de Violencia de Género; estereotipos; hegemonía; entre otros, fomentan la reflexión y el diálogo entre los participantes, priorizando la libre expresión y el intercambio de ideas. Asimismo, antes de conformar los grupos existen las entrevistas de admisión en las que se evalúa si la persona cuenta con los criterios de admisibilidad acordes al abordaje grupal. Cabe aclarar que quienes no cumplen con dichos criterios son personas con consumo problemático, quienes padecen alguna psicopatología severa y delitos contra la integridad sexual.
En el marco de la primera entrevista dentro del PLB, se le brinda una cita con las profesionales a cargo de los Dispositivos. Dicho grupo está conformado por una profesional en psicología y una o varias Trabajadoras Sociales.
Una vez conformados los grupos, se los cita una vez a la semana a participar del Dispositivo de manera presencial, la duración del mismo es de 2 horas. Cabe aclarar que se tienen en cuenta, entre otros aspectos, la vida laboral de los participantes. Este es uno de los condicionantes para organizar los horarios en que se llevan adelante los dispositivos con el objetivo de lograr la asistencia y permanencia dentro de los mismos. Respecto a esto, el taller cuenta con 10 encuentros presenciales que, en un principio, se brindaban en la Sede del PLB del partido de Florencio Varela y, a partir de mediados del año 2024 los encuentros se realizan en la Universidad Nacional Arturo Jauretche mediante un convenio realizado entre ambas Instituciones. La Universidad se consolida cómo un lugar que los recibe y les ofrece ocupar un espacio académico que les permita formar subjetividades que impacten en sus vidas al transitarlo. Asimismo, esto evidencia la importancia de las políticas públicas llevadas adelante de manera integral por diferentes Instituciones del mismo partido. En este caso particular, las personas supervisadas residen en Florencio Varela, por lo que el acompañamiento que se brinda en la trayectoria de los procesos que se encuentran atravesando no sólo es de control sino que se busca brindar espacios que contribuyan al reconocimiento de la masculinidad hegemónica cómo el condicionante normativo para las interacciones que sostenemos en nuestras vidas cotidianas ya sean familiares, amorosas, laborales cómo padres, parejas, amigos, vecinos y para pensar de manera grupal la existencia de mandatos construidos, interiorizados que condicionan nuestras vidas y nos hacen accionar de manera desigual.
Ahora bien, retomando la postura reiterativa de la defensiva respecto del feminismo no sólo cómo algo opuesto sino algo de lo que hay que defenderse propone un desafío para las profesionales a cargo. En este sentido, la psicoanalista argentina, Débora Tajer aborda la postura defensiva del machismo frente al feminismo desde una perspectiva crítica que cuestiona las estructuras de poder y las construcciones subjetivas tradicionales. En otras palabras “lugar que necesitan ocupar” Tajer (2025)
Tajer identifica una crisis de legitimidad del patriarcado señalando que, aunque persiste, ha perdido parte de su autoridad social. Además, destaca que muchos varones, al cometer actos de violencia, se preocupan principalmente por las consecuencias sociales y legales de sus acciones que por el daño infligido a las víctimas. Esta actitud refleja una cultura de impunidad masculina que minimiza la gravedad de la violencia de género y la responsabilidad individual en su perpetración. Tajer (2021)
No obstante, en las experiencias vivenciadas en los dispositivos concretados desde el 2023 hasta la actualidad, dicha postura sólo se registra en los primeros encuentros. A medida que avanza el taller y cómo observadora participante se ve que, a través del debate en dónde las emociones son permitidas y crean vulnerabilidad en los sujetos involucrados se comienza a interpelar ese lugar de privilegio y del “deber ser” en dónde los sitúa la masculinidad hegemónica. Al encontrarse en la palabra de un par, surgen más interrogantes que las profesionales invitan a debatir y reflexionar y desde allí, surgen las nuevas herramientas con las cuales se abordan los mandatos de masculinidad, los privilegios y costos.
Conforme se va avanzando en el taller, los varones que, en un primer momento, no se reconocían como parte de un grupo social que ejerce violencia, comenzaron a identificar puntos en común al relatar sus propias experiencias de vida. A través de esos relatos, emergieron similitudes y patrones compartidos que los fueron agrupando subjetivamente dentro del espacio de trabajo. El dispositivo funcionó como un lugar que los alojaba, escuchaba y habilitaba la reflexión sobre sus modos de actuar frente a diversas situaciones cotidianas o conflictivas.
Este proceso de escucha colectiva e introspección derivó en una toma de conciencia clave: muchas de esas acciones no eran individuales ni aisladas, sino que estaban fuertemente condicionadas por mandatos y aprendizajes culturales, propios de un modelo tradicional de masculinidad. Así, la reflexión permitió abrir preguntas sobre la construcción social de sus prácticas, y habilitó un movimiento inicial hacia formas más responsables, conscientes y menos violentas de vinculación.
El Dispositivo de Nuevas Masculinidades entonces, se concreta cómo un espacio de reflexión crítica en donde los varones puedan asumir la responsabilidad de sus conductas, revisar sus creencias y reconocer los efectos de sus actos sobre otras personas. De igual modo, promueve formas basadas en el respeto, la empatía el cuidado y la equidad. Esto no solo impacta en las relaciones de pareja, sino también en la vida familiar, laboral y social de los varones.
En el caso de contextos de supervisión penal, estos dispositivos son una herramienta complementaria esencial para disminuir el riesgo de reincidencia en casos de violencia y facilitan procesos de reinserción social más sostenibles.
Desde el Trabajo Social y cómo profesionales agentes de cambio nuestra intervención favorece que los varones puedan reconocer sus prácticas, interrogar sus creencias y transitar procesos de cambios desde una lógica no punitiva, pero sí de responsabilización.
Asimismo, el Trabajo Social sostiene una intervención basada en el respeto, la no discriminación y la garantía de derechos, promoviendo espacios que, sin justificar la violencia, permitan trabajar con los varones desde una lógica de transformación y corresponsabilidad.
En lo expuesto hasta aquí, queda demostrada la importancia de contar con estos espacios específicos para varones, dónde se habiliten procesos de transformación subjetiva mediante la revisión de los mandatos de género y el reconocimiento de las prácticas violentas naturalizadas.
Estos dispositivos no sólo permiten interpelar la masculinidad hegemónica sino que abren la posibilidad de construir otras formas de ser varón, más justas y libres de violencia.
Del mismo modo, queda en evidencia la falta de dispositivos de este tipo en diferentes Instituciones públicas y comunitarias, lo que refleja una deuda en términos de políticas públicas integrales con perspectiva de género orientadas a varones. En este sentido, es fundamental destacar que estos espacios no deberían pensarse sólo como intervenciones posteriores a hechos de violencia consumada, sino como herramientas preventivas que permitan anticiparse a la reproducción de patrones violentos a través del trabajo educativo, comunitario y reflexivo con los varones.
La implementación sostenida y territorializada de estas políticas en las diferentes instituciones podrían tener un alto impacto social contribuyendo a reducir las violencias de género y a promover las nuevas formas de masculinidad.
AUTORA:
Eliana Barroso. Estudiante avanzada de la Carrera de Trabajo Social de la Universidad Nacional Arturo Jauretche.
Referencias Bibliográficas
Informe Violencia de Género en el Ámbito de la Ejecución Penal en Libertad. Patronato de Liberados Bonaerense. Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. (2023). Disponible en: https://www.plb.gba.gov.ar/boletin/informes/Informe_final_VG.pdf
Ley 12256 de Ejecución Penal Bonaerense. Disponible en: https://www.mseg.gba.gov.ar/areas/marconormativo/Leyes%20provinciales/ley12.256_ejecucion_penal.doc
Tajer, Débora. [Asociación Libre] (2025). Dra. Débora Tajer “MASCULINIDADES” | Experiencia Tavil Ep. 17 [Archivo de Video]. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=RGqPTOG_mfI&t=3846s
Tajer, Débora. (Revista Ají) (2021). 8 de Marzo: “UNA RESISTENCIA DESDE LOS VALORES FEMINISTAS” Disponible en: https://www.revistaaji.com/resistencia-feminismo/