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Universidad Nacional Arturo Jauretche | Instituto de Ciencias Sociales y Administración | Licenciatura en Trabajo Social

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Resumen

La significancia de ampliar la visión en la formación de futuras/os médicas/os en cuanto a lo psíquico de la salud resulta vital para que la lógica unicausal que propone el paradigma del modelo médico hegemónico no siga sosteniéndose. Es por ello que la estrategia de atención primaria de salud es oportuna en la construcción de la salud mental comunitaria como modelo a implementar en sus prácticas  solidificando la idea de que la Universidad Pública será capaz de brindar garantía de calidad en las competencias prácticas y teóricas en salud mental desde una perspectiva territorial y comunitaria.

El presente artículo relata  una experiencia de curricularización de la vinculación acerca de las prácticas en salud mental comunitaria, integrada por estudiantes de la carrera de medicina de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, en su escenario, el centro de integración comunitario Maria Eva, el Equipo de Salud Mental Comunitaria (ESAMEC) del municipio de Quilmes, y la comunidad de influencia, aunada por estudiantes y docentes, en un encuentro con lo transitado a fin de poder compartir las implicancias, significados y desafíos que se presentan en esta vinculación.

La pugna de paradigmas nos brinda la oportunidad de abordar debates desde la integralidad, abordando desde la práctica nuevas formas y métodos desde una perspectiva de derechos, de género, intercultural y transformadora. 

Palabras Claves: salud mental comunitaria, formación médica, interdisciplina

 

Introducción

En el marco de la misión de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, como lo refiere su estatuto acerca de contribuir a través de la producción y distribución de conocimiento, al desarrollo económico, social y cultural de la región, para mejorar la calidad de vida y fortalecer los valores democráticos, articulando el conocimiento académico con los saberes producidos por la comunidad, y del programa de  la asignatura Articulación Comunitaria III de la carrera de Medicina de nuestra Institución, tiene como objetivo promover una integración conceptual y territorial que permita poner en contexto las problemáticas de salud presentes en las comunidades, fortaleciendo la mirada integral y los abordajes interdisciplinarios. 

La Ley Nacional de Salud Mental y Adicciones -26.657- sancionada en el año 2010 propone un cambio de paradigma que, rompiendo con el viejo modelo tutelar y asilar, sostiene un modelo centrado en la comunidad. El enfoque de la salud mental que propone incluye la perspectiva de derechos, promueve el cuidado de la salud integral, retoma los determinantes sociales que influyen en la salud, fortalece las acciones de Atención Primaria de la Salud, prioriza la creación de nuevos dispositivos sustitutivos del sistema manicomial, y da prioridad a las acciones y estrategias comunitarias. 

Para que dicho cambio sea posible es necesario la transformación,  que implica la transición del viejo paradigma en salud mental, para dar lugar a la conceptualización de la salud desde la perspectiva de la complejidad y desde la determinación social de la salud promoviendo  abordajes interdisciplinarios e intersectoriales. En tal sentido, plantear la integración de lo psíquico en las acciones generales de salud es la esencia de la asignatura Articulación Comunitaria III. 

La significancia de ampliar la visión en la formación de futuros profesionales en cuanto a lo psíquico de la salud resulta vital para que la lógica unicausal que propone el paradigma del modelo médico hegemónico no siga sosteniéndose. Es por ello que la estrategia de atención primaria de salud es oportuna en la construcción de la salud mental comunitaria como modelo a implementar en sus prácticas  solidificando la idea de que la Universidad Pública será capaz de brindar garantía de calidad en las competencias prácticas y teóricas en salud mental desde una perspectiva territorial y comunitaria.

A su vez, desde el paradigma de la complejidad, se reconoce la multiplicidad de determinantes que intervienen en el proceso de salud-enfermedad-atención-cuidado de las personas con padecimientos mentales tales como componentes socio-económicos, culturales, biológicos, psicológicos, históricos, entre otros; y de este modo, reconoce la necesidad de pensar los abordajes desde la interdisciplina, la intersectorialidad y la interactoralidad. 

El presente artículo relata  una experiencia de curricularización de la vinculación acerca de las prácticas en salud mental comunitaria, integrada por estudiantes de la carrera de medicina en su escenario, el centro de integración comunitario Maria Eva, el Equipo de Salud Mental Comunitaria (ESAMEC) ambos en el municipio de Quilmes, y la comunidad de influencia, presentada por sus autores, estudiantes y docentes, en un encuentro con lo transitado a fin de poder compartir las implicancias, significados y desafíos que se presentan en esta vinculación.

Un punto de partida

A partir de los lineamientos mencionados que se enmarcan en  la Ley Nacional de Salud Mental y la relevancia del enfoque de la salud mental comunitaria en la formación de futuros  profesionales, es que, describiremos la construcción de trabajo con la comunidad que la Universidad Nacional Arturo Jauretche, a traves Instituto de Ciencias de la Salud, realiza con las/os  estudiantes de Medicina en los centros de salud . El perfil académico se proyecta en moldear profesionales sólidamente formados con conocimientos que le permitan comprender el contexto social, histórico, político y económico en el que desarrollarán su práctica orientada vigorosamente hacia la medicina general integral. De esta manera, se promueve una visión estratégica de la real incidencia que tiene la práctica comunitaria en el desarrollo del sistema de salud haciendo uso de herramientas y conceptos de la atención primaria de la salud, de la epidemiología crítica y de la bioética permitiendo respetar la diversidad y multiculturalidad de la población. Además, resaltará en la capacidad de integrar equipos aportando a la interdisciplina e intersectorialidad y desarrollará trabajos de investigación que evalúen y enriquezcan la propia práctica. Las/os egresadas/os estarán capacitadas/os para intervenir en las tareas de promoción de la salud, prevención y atención de enfermedades prevalentes en las personas, y sobre todo en las familias y comunidades.

A raíz de esta fuerte impronta comunitaria, el plan de estudio de la carrera de Medicina en la Universidad Nacional Arturo Jauretche incorpora la transversalidad de las materias con actividad territorial. Particularmente, la asignatura Articulación Comunitaria III, ubicada en el cuarto año de la carrera, se fundamenta en el análisis de la complejidad proponiendo integrar los marcos conceptuales, métodos y competencias de las materias que los estudiantes simultáneamente cursan; entre ellas “Salud Mental”, “Condiciones de Vida, Autoagresión y Estrés” y “Epidemiología”. Esta convivencia de contenidos y prácticas facilita un aprendizaje espiralado, que se retroalimenta permanentemente en la formación. 

Esmerilando la experiencia.

Nuestra experiencia tiene un centro y un contexto:  Centro de Integración Comunitario (CIC) Maria Eva, ubicado en el Barrio IAPI. en el municipio de Quilmes y la comunidad que constituye el área de influencia del CIC.

Durante el año 2020, en contexto de pandemia, se llevaron adelante prácticas comunitarias que permitieron potenciar la capacidad de aprendizaje y análisis en el campo de la salud mental comunitaria.  Desde una perspectiva integrada, los estudiantes accedieron a participar del Equipo de Salud Mental Comunitaria -ESAMEC- conformado por un equipo interdisciplinario móvil con enfoque comunitario. La interdisciplina se refleja en la composición del equipo constituido por una psiquiatra, un psicólogo y una trabajadora social.

ESAMEC se crea en el marco de la estrategia comunitaria integral para mitigar el brote de COVID-19 en el barrio de Villa Azul a partir de la implementación del aislamiento comunitario en el mes de mayo de 2020. Es un dispositivo intermedio cuya fundamentación se encuentra en la Ley Nacional de Salud Mental-  26.657- y en la Ley de Derechos del Paciente -26.529 – con el objeto de garantizar, a través de un abordaje integral, los derechos en materia de accesibilidad a los servicios de salud mental. 

El dispositivo está destinado para aquellas personas que se encuentran en una situación de padecimiento mental severo, y tiene como objetivos establecer terapéuticas adecuadas y singularizadas brindando accesibilidad a la atención a personas que se encuentren impedidas de realizar un tratamiento bajo la modalidad ambulatoria, ya sea por su situación de crisis o por inmovilidad motriz. Para la eficiente concreción de dichos objetivos, se  promueve el fortalecimiento de los lazos institucionales y comunitarios necesarios para la inserción socio-laboral de las personas con padecimiento psíquico. 

La participación de los estudiantes de la carrera logró posicionarse en las actividades como actores de un esfuerzo organizado y planificado en función de los requerimientos de las personas con quienes el equipo móvil realiza sus visitas domiciliarias, adquiriendo conocimientos en el uso de recursos y la metodología implementada en el terreno con el cese de una mirada únicamente asistencialista sino del fortalecimiento de las comunidades.

El lugar de encuentro para desarrollar las actividades del equipo fueron los días lunes en el Centro Integral de Salud, Diagnóstico y Rehabilitación “Julio Méndez” de la localidad de Bernal y los días jueves desde el CIC María Eva, siendo ambos lugares desde donde el equipo hace base para la partida y la llegada luego de la recorrida de planificación semanal y siendo ambos días- lunes y jueves- los días en que funciona el equipo de ESAMEC. 

Los días jueves el equipo tiene la reunión de equipo semanal en la cual analizan y evalúan las distintas estrategias de abordaje posible para cada situación particular que acompañan. Luego de la reunión de equipo el móvil los traslada a los domicilios para el abordaje territorial. 

La experiencia de los estudiantes comprendió la participación en una reunión de equipo, en la cual pudieron registrar las lecturas clínico-comunitarias de los usuarios que acompaña el equipo, englobando en dicha lectura el contexto familiar y social. Se evaluaron las estrategias de abordaje a implementar y se procedió a realizar las visitas programadas para ese día ubicadas en el barrio de Villa Itatí y Bernal. Debido al contexto de pandemia se utilizaron las medidas de prevención y elementos de bioseguridad que la emergencia sanitaria requiere. 

Camino a las visitas, los estudiantes realizaban preguntas en relación a la situación de salud de cada persona con respecto a su padecimiento mental, contexto familiar, acceso al sistema de salud, recursos disponibles, entre otros. Al momento de la llegada, el equipo se dirigía a los domicilios a  partir de los cuales, en muchos casos, se registraba la vulnerabilidad social a la que estaban sometidos, además del padecimiento mental que sobrellevaban. Se observó pobreza estructural, viviendas precarias, ausencia de saneamiento del barrio, necesidades básicas insatisfechas, trabajo informal e insalubre, malnutrición, consumo problemático, entre otras. A pesar de ello, en las respuestas de la psiquiatra, psicólogo y trabajadora social presentes podía reflejarse el trabajo en red que llevaban adelante para intentar brindar respuesta a sus problemáticas de manera real e integral (más allá del abordaje clínico) con instituciones como comedores, centros culturales, CIC, etc.

Praxis y territorio

En una aproximación detallada, se identifican dos actividades de la experiencia que reflejan la esencia del trabajo en su conjunto. Se trata de dos visitas llevadas adelante por el equipo de ESAMEC con la participación de los estudiantes. En ellas se reflejan particularmente los conceptos de redes e interdisciplina en el marco de la salud mental comunitaria lo que finalmente acreditará y afirmará que este tipo de prácticas son necesarias en la formación académica de grado para cumplir con los objetivos que la ley proyecta. 

En la primera de ellas,  la visita se ubica en el Barrio de Villa Itatí con la familia de un adolescente de 14 años de edad a quien el equipo de ESAMEC venía realizando seguimiento y acompañamiento frente a la demanda de la madre en el área de niñez acerca de una internación compulsiva para su hijo en una comunidad terapéutica.  Intervención que ya había sido implementada en reiteradas oportunidades, quedando en evidencia el fracaso y la ineficacia de la misma. 

A raíz de la ausencia del joven en su domicilio, el equipo trabajó con la madre conversando sobre sus preocupaciones y temores con respecto a su hijo, al mismo tiempo que se dirigió hacia el comedor del barrio donde suele asistir el joven para realizar actividades recreativas a los fines de encontrarlo. Si bien no se concretó el encuentro en esa visita, es parte del trabajo del equipo situaciones similares en las que no se encuentra a la persona a quien acompañan, pero trabajan con la familia y/o el entorno socio comunitario en el cual habita. 

Tomando el concepto de redes como estrategia de generación de vínculos para la complejidad de un problema, los estudiantes junto al equipo consideran al comedor del barrio como un actor social clave funcionando como contención dentro del tejido social armado; aquí se refleja el fortalecimiento de los vínculos entre las instituciones y las familias que componen la comunidad. Estas redes resultan necesarias para lograr la articulación con el sistema de salud facilitando la accesibilidad al mismo a fin de brindar atención integral en sus componentes de cuidado, promoción y prevención.

Finalmente, al encuentro con la referente del comedor, la misma comenta que debido a la pandemia hay cese de actividades en el lugar; lo cual, el equipo lo identifica como obstáculo en cuanto a las líneas de acción comunitarias planificadas. 

En la segunda experiencia, la visita se ubica en un barrio adyacente al CIC con la familia de un joven de 18 años quien padece esquizofrenia. Con relación a su padecimiento mental, se identifican en su historial clínico, síntomas positivos los cuales comprenden alucinaciones, ideas delirantes, pensamiento desorganizado y bloqueo de pensamiento. Su familia compuesta por su madre, padre y hermana demuestran preocupación ante sucesos de agresividad que desarrolla en sus crisis y también por el encierro en su habitación que no le permite desarrollarse en su vida. La psiquiatra resaltaba a los estudiantes la focalización en las características del espacio de residencia el cual se encontraba semivacío, desamueblado, desabrido, con casi nula iluminación y escasa ventilación; las ventanas del dormitorio del adolescente se encontraban cubiertas con trozos de gomaespuma de colchón colocados por él para evitar la luz solar.

La  reclusión detallada tampoco le permite al joven realizar un tratamiento bajo la modalidad ambulatoria. Este último motivo es por el cual el equipo se encuentra interviniendo con el fin de promover la construcción de lazos sociales, actuando de puente, para que pueda sostenerse en las redes comunitarias y/o mediante un tratamiento ambulatorio con base en su comunidad.

A modo de conclusión, de la experiencia formativa a la experiencia transformadora

A partir de la experiencia en un dispositivo intermedio de salud mental comunitaria podemos registrar la relevancia de la formación académica en tanto productora de subjetividad de profesionales de la salud en relación a los abordajes integrales desde un modelo de la atención y cuidados hacia los usuarios de salud mental. Así, en el proceso pedagógico, las/os estudiantes se transforman al tiempo que transforman los dispositivos que abordan. La formación en territorio sobre nuevos dispositivos adecuados a los paradigmas actuales apunta a la praxis como síntesis superadora. 

Desde la perspectiva de los estudiantes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche se reafirma que la formación en la educación superior, en lo que a salud mental respecta, debe orientar sus esfuerzos a la incorporación,en las currículas académicas, de la participación en el territorio en toda la formación con el fin de gestar profesionales comprometidos con la realidad social en un rol participativo y no únicamente observacional. Además, se ratifica la necesidad de que los conocimientos a adquirir deben estar enmarcados en los principios y bases de la ley de salud mental  para seguir sosteniendo el paradigma que la misma propone. 

Desde el rol docente enriquece transmitir la interdisciplina no sólo en términos retóricos, sino más bien, transmitir lo “inter” en acto de manera sostenida y estructural  a partir de la conformación del equipo de la asignatura Articulación Comunitaria de modo interdisciplinario favoreciendo el enfoque integral de la salud. 

La pugna de paradigmas nos brinda la oportunidad de abordar debates desde la integralidad, abordando desde la práctica nuevas formas y métodos desde una perspectiva de derechos, de género, intercultural y transformadora. 

Identificamos como próximos desafíos continuar interpelando las resistencias visibles en  las prácticas de salud mental con lógicas hospitalarias en los centros de atención primaria de salud, como así también continuar reflexionando en las diversas formas posibles de habitar y transitar la Ley Nacional de Salud Mental a los fines de ir otorgándole mayor materialidad mediante dispositivos novedosos con anclaje territorial que promuevan la participación comunitaria.

Autoras

Jahnavi Ananda Blazquez

Facundo Galizio

Edgardo Daniel Nores

Celeste Silanes

(Estudiantes de Medicina UNAJ)

Bibliografía

Ley Nacional de Salud Mental 26657 – Decreto reglamentario 603/2013- Dirección Nacional de Salud Mental y Adicciones

Lewkowicz I. y De la Aldea (1999). La subjetividad heroica. Un obstáculo en las prácticas comunitarias en la salud. Conferencia en el Hospital Durand, Inédita. Recuperado de:

https://campuseducativo.santafe.edu.ar/wp-content/uploads/la_subjetividad_heroica_escrito_por_elena_de_la_aldea41.pdf  

Rovere, Mario. (1999) Redes en Salud: Un nuevo paradigma para el abordaje de las organizaciones y la comunidad, Rosario: Ed. Secretaría de Salud Pública/ AMR, Instituto Lazarte, 1999.

Stolkiner, A. (2005)  Interdisciplina y Salud Mental. IX Jornadas Anuales de Salud Mental- I Jornadas Provinciales de Psicología: Salud Mental y Mundialización. Estrategias posibles en la argentina de hoy. Posadas, Misiones, Argentina. Recuperado de: http://www.psi.uba.ar/academica/carrerasdegrado/psicologia/sitios_catedras/obligatorias/066_salud2/material/unidad1/subunidad_1_3/stolkiner_interdisciplina_salud_mental.pdf

 

 

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